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Y no vivieron felices para siempre

La boda fue el evento del año, también se le dio el mote de “Boda Real del Siglo XX” pues fue además de los invitados de honor al enlace, la boda fue presenciada por unas 3 mil 500 personas en los alrededores de la Catedral de St. Paul, a esto hay que sumarle aproximadamente 750 millones de personas que presenciaron el enlace a través de sus televisores en todo el mundo y los que lo hicieron a través de la radio.

Carlos la esperaba en el altar ataviado con el uniforme de la Marina Real, Diana llegó a la Catedral portando un espectacular vestido color marfil, con una cola de 25 metros y adornado con lentejuelas y 10 mil perlas bordadas a mano por los diseñadores Elizabeth y David Emmanuel, acompañando el ahora clásico vestido, imitado mucho tiempo después por miles de mujeres alrededor del mundo.

Fue en febrero de 1981 que el príncipe Carlos, de 32 años, anunciaba su compromiso con la hasta entonces desconocida Diana Spencer, de 20 años. El noviazgo duró poco, sólo 6 meses, después de los cuales se dieron el sí dando inicio a una de las historias más controvertidas de la realeza.

Todo parecía un cuento de hadas. Diana adquirió el título de Su Alteza Real La Princesa de Gales. Para 1982 nace William, su primogénito, a quien presentan al pueblo británico, que seguían muy de cerca la vida de esta familia. Lo mismo ocurre en 1984 cuando nace Harry, su segundo hijo.

Con el paso de los años, nadie se imaginaba que dentro de las puertas del Palacio de Buckingham las cosas estaban cambiando. Para finales de los años 80 era evidente el distanciamiento de Carlos y Diana. En ella se acentuaron periodos de depresión y bulimia, incluso algunas biografías llegan a asegurar que atentó contra su vida en mínimo 5 ocasiones. Esto a causa de la impotencia ante la sombra que representaba Camila Parker-Bowles, amante del príncipe Carlos.

La publicación de un libro de Andrew Morton sobre Diana, en el que el autor se reafirmaba en la tesis del fracaso matrimonial y la confirmación de que Carlos mantenía una relación con su vieja amiga, Camila Parker Bowles, convirtieron en noticia las especulaciones de los últimos meses.

La separación era definitiva, pero no fue hasta el 28 de agosto de 1996 que se firmó el divorcio, durante este tiempo muchas cosas más saldrían a la luz.

Cada vez se hicieron más frecuentes las apariciones de Carlos en eventos públicos acompañado de Camila, lo que le originó que su popularidad entre los ingleses disminuyera, porque por su parte Diana se fue desprendiendo poco a poco de la Familia Real y se dedicó a realizar obras benéficas. Su belleza, estilo y sonrisa cautivaron a miles de personas de todo el mundo que se sentían fascinados con su manera de ser y querían conocer más de la Princesa, y los medios de comunicación cumplían sus deseos, pues seguían los pasos de Diana en todo momento.

Con el tiempo se siguieron dando a conocer diversos nombres de supuestos amantes de la Princesa Diana, ninguno de ellos confirmado por ella misma, entre los que se encuentran: el millonario Oliver O`Hare, un vendedor de autos de nombre James Guilby, el entrenado de la selección inglesa de rugby, Will Carling y el millonario Christopher Whalley

El último hombre que apareció en su vida fue Dodi Al-Fayed, hijo del multimillonario Mohamed Al-Fayed. Fueron los paparazzis quienes dieron a conocer esta relación a través de diversas fotos, los seguían a todos lados y la historia llegó a su fin el 31 de agosto de 1997.

Diana y Dodi habían tenido esa noche una cena en el Hotel Ritz de Paris, tras lo cual, y ante la insistencia de los paparazzis por obtener una foto de la pareja, deciden salir a toda velocidad por la puerta de atrás del hotel en coche conducido por Henri Paul. Minutos después y bajo el Puente de Alma el auto se estrellaba contra una de las columnas, Dodi falleció al momento, Diana quedó malherida y fue trasladada a un hospital donde finalmente murió

El funeral de Diana fue llevado a cabo el 6 de septiembre de 1997, su muerte fue otro acontecimiento a nivel mundial, casi lo mismo que su boda, fue transmitido a todo el mundo y los británicos inundaron las calles para darle el último adiós a su ‘Reina de Corazones’.

Fuente: www.milenio.com

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